viernes, 23 de mayo de 2008

NADA y Priscila



Se manchó los dedos con su pluma atómica y decidió que no escribiría ninguna nota que explicara su suicidio.




LA GORDA PRISCILA



















SE SIENTE CLEOPATRA.


















SE BAÑA EN SU LECHE,


















MI MIRA, ME MIRA.










































PLATICA CONMIGO,


















ME MIRA, ME MIRA.










































SE SUBE A LA CAMA,


















ME SUELTA SU COLA.










































LA GORDA PRISCILA


















ME MIRA, ME MIRA.










































SE PONE SUS CREMAS,


















ME LLEVA A LA CAMA.


















POLVEA SUS NALGAS.


































































LA GORDA, LA GORDA,


















SE RIE Y SE CALLA.










































SE PONE RUBOR


















Y SE UNTA LAS PATAS.










































ME CANTA CON FUERZA,


















LA POBRE ES MALSANA,


















Y HABRÁ QUE CUIDARLA.


















ES LINDA Y ES FRÁGIL.


































































SE MUERE DE AMOR,


















SE MECE, SE MECE…










































CUAL GATA, COQUETA,


















ME UNTA MENJURJES,


















DE SAVIA, DE COLCHA,


















SE LLAMA CRISTINA,


















SE DICE PRISCILA,


















SE VUELVE UNA ESCLAVA,


















DE LUCES Y ESTRELLAS.










































QUIERE SER MUCAMA,


















SE VISTE DE ARMIÑO.


















QUIERE SER MODELO,


















LAMENTA SU ESTAMPA,


















SE CUBRE LAS CANAS,


















YA ES UN POCO VIEJA.


















¡QUIÉN QUIERE COMPRARLA!










































POR LA QUINTA COPA


















DE CAMA TRAS CAMA,


















DE ORILLA EN ORILLA,


















LA GORDA CRISTINA,






PRISCILA, PRISCILA,


















MUCHACHA O MOFETA,


















SE VISTE DISCRETA,


















SE ESCUCHA SU RISA,


















ESTRELLA DE MODA,


















LA GORDA PRISCILA,


















SE COMPRA UN MARIDO,


















SE VISTE DE RUBIO,


















SE PINTA LAS UÑAS,


















TACONES DE ESMALTE,


















DE TONOS SIN FIN.










































SU CUELLO ARRUGADO,


















NO QUIERE SER VISTA,


















SE MUERE DE ASFIXIA.










































LA GORDA NO ES GATA,


















NO ES BELLA, NO ES FLACA.










































SE MAQUILLA LINDA:


















SE HOSPEDA EN UN CERILLO.


















SU VIDA ES UN RESPIRO,


















SU CUERPO, UN ATAÚD.






































































































EL EQUILIBRISTA

* * *
Después de haber dejado la corbata empieza a caminar por la sala de su casa. Se dispone a dar el segundo paso; retrocede y quiere avanzar de nuevo; da el siguiente paso; luego, el último.



Benjamín Gavarre

LYZBETH

 De bruja, corcel de bruja quisiera. Te invoco bajo el nombre de la más puta. Sales de la persiana, puta de todos los cerrojos. Tu nombre no es Alberta, no es Beltrana; sin camisa hueca te hueles los sobacos, enredada en sandalias de pátina roja. Josefina horrorizada te observa a ti en tu mala casa de bestia de chancro blando. Bruja de la puerta, de todas las puertas subterráneas. Sin engaño subes con toda la noche. LyZbeth que me quiere hipnotizar y luego flagelar, oh Cerda, te nombro con todos las horas que vendrán, muy putas, ¡LyZbeth!
Benjamín Gavarre

¡Dónde están!



Es territorio fangoso, pero detrás del escudo vive un ámbito de peces, refugio de coral. Luminosos amigos
nos esperan.
Benjamín Gavarre

El Mago

 Se puso la chistera; sonrío a su imagen; retocó el bigote; abrió la puerta: salió.
Después de los aplausos entró a su camerino; se quitó la chistera y la puso encima de la cama.
Los aplausos seguían a lo lejos, insistentes. El espejo, complacido, lo miró, para siempre, por última vez. 

 Benjamín Gavarre

jueves, 22 de mayo de 2008

Destino


La estrella estaba muerta.

También
el pescador
que nunca se
ENTERÓ
del pronóstico del tiempo.



De nada

De
nada

De dónde
Eh!!!

Dime



Mezclados doy,
di,
dardos desnudos.


Debes,
don de duendes,

darme la de todos

los de débil dinastía. 

De adelante donde duele dame. 


!Dameeeee!!


¡Demonios!

¡Diablos!



 ¡Déjame decirte!


Decía.


¡Ejemmh!

Debes




¡Debes!!!!!!

Doblemente:
decidirte: 


Deja sordos ademanes,

digo,

de dura,

dudosa,

procedencia. 


Dando de todos modos 

dobleces terminados,

de dichas decenas de diamantes,

días encendidos, 

despedida despacio

quedo diré,


desde dentro:


desdén


DESDÉN

sÍ,


DESDÉN!!!!


NO

desdibujado.





dibujado


muy

DIBUJADO



dibujado



DIBUJAAAAAAADOOOOO






Benjamín Gavarre















VERANO

 ↑ ¤ V E R A N O

La fría paleta de limón era un estorbo, el sol se había derretido.

  Benjamín Gavarre

CATEDRAL DE OLAS

Viene alba vital con la espera de un alivio. 
El viento, en las cortinas. 
El mar, atento a la duda,
a la traición,
al sueño y al olvido. 


Fatalidad



Salió de su casa y pensó que subiría al autobús. Corrió. La señal fue notoria, simple. Lo atropellaron. Era previsible, necesario sin duda.
Benjamín Gavarre

miércoles, 21 de mayo de 2008

Albatros

Albatros viene.
Es del color de la cera y no cuenta las horas. 
Tiene la sonrisa de un tumulto 
en llamas. 
Atento sonrío a su caudal de razones
a sus fabuladas nuevas,
a sus Aleteos de locura.
De albatros viene
de amorosa E 
de amorosa U
En pleno vuelo 
A tiempo, 
desde luego:
Se marea.
Se disgrega. 
Gesticula.
Sin resistencia
desvaría.
Conviene a su estatura
la risa y el gesto del Clown.
Desciende despacio...
desde la magnífica estatura de sus alas 
Profundo tu aliento: 
sin aliento me dejas. 
Sucumbo tartamudo.
Sí, y más tu vientre. 
Alba Atroz 


Albatros:

ESAÚ

Benjamín Gavarre

Viaje redondo

 La esencia de un perfume:
Altas olas (definitivo altar).
La flecha se aventura al cielo.
Fresco pino, 
estremecedor anhelo.
Un río: 
una sonrisa de manzanas de aceite,
de atardecer redondo.
Benjamín Gavarre

Señales

Señales llegan

Luz salada. Y se despereza,
eterno, el Animal,
el mar, en olas. 

Señales lejos

Mapa inútil, sin lágrima: 
el caparazón de la tortuga.

Señales sin sueño

Danza inicial, Iris cretácico: 
sombra de ropajes tintos. 

Señales soledad
Ventana sin afuera:
Los dioses, jeroglíficos, 
se asoman.  

Señales al final

La sonrisa fósil del insecto
se hace sol,
luz total,
rotundo rojo

Benjamín Gavarre

¿No te gustó?

¿No te gustó? Mientras tengo la boca pegada en el espejo escucho el radio shu shu garaluz Mis ojos grandes Apago la luz y la pupila abierta enorme se inunda Prendo la lámpara Ni una lágrima Yo * Salgo a la calle Olvidé el sombrero No yo no uso Mis ojos turbios tengo frío ¡qué semáforos! ¿Por qué la lluvia es verde? La mesera no me entiende Con dos cucharadas le digo No me sirve nada me voy * Voy a prender otro cigarro me gustaría un sombrero Voy a entrar al cine Ultima butaca Un tipo se acerca me la agarra me masturba me voy película sin títulos no sé alemán me voy no veo la cara del tipo me vine me voy qué asco de película * No voy a cerrar la puerta y no me importa que se enoje Maldito gato, me araña la pierna; lárgate, así está mejor. Comida, eso está bien; qué tiene este pendejo; mermelada, cajeta, pan en celofán, leche; todo; que vuelva a comprar. Mejor ya me duermo; o qué, ¿lo espero?

BG

martes, 20 de mayo de 2008

Desierto de los leones

 DESIERTO DE LOS LEONES

Recorro las ermitas mutiladas,
las capillas de vahos y lamentos musgos.
El aire se confunde y me entretengo en poseer
la visión de los que vienen: 
soy de ellos, somos nosotros, 
carmelitas desnudos.
Levitamos.
Monje de ayunos, de cilicios,
tu sola mano me lleva, a mí,
discípulo sin fe,
por líneas curvas,
jardines, techos, campanario: 
barco en ruinas.
Es la primera batalla del viento,
en mar remoto, 
y gana Bruma.
Sobre la bóveda arenosa de la ermita: 
el caracol marino, la estrella, el pez:
Desprevenidos todos. 
―Detrás de los manglares turquesa se oculta
Satanás, 
me dice el monje.
―Soy Ehécatl, me dice un soplo:
presagio mil aires; 
soy pájaro cáncer, 
temblor de templos. 
Los monjes me miran con sus ojos rotos.
Perforación de un cráneo, 
el mío:
no soy, 
no,
no soy de ellos.
Convento precipicio,
no despierto.
Me sale en fosa-menta el alma. 

El agua en este mar convento es un brebaje anfibio.

Monje espurio, tampoco soy azteca.
Con venas saladas, me mareo.
Tras súbito vuelco, sin espanto,
crepito en ola
y casi no distingo
a los monjes sin sus anclas y sus vergas,
sin sus mástiles,
sus velas.
No acudirán al arribo de los dioses del oriente,
o dios,
ni yo tampoco.

Cuando alcanzo a vigilar las carabelas humo,
los follajes luz, gris perla,
miro pared, tapiz, lámpara,
y ese no soy
ya no
no lo aseguro. 

Benjamín Gavarre 

CELEBRACIÓN MANDARINA


Celebración mandarina 

En el espacio sin sal asistimos 
al triunfo contra la seda maligna.
El que se come frío.
Lágrimas tardías quieren arruinar mi vigorosa fiesta. 
De severa especie,
la artesana, urde ahora disculpas vanas.
Prodigio del trópico, 
hilarante autora de su propia ruina, 
no me podrá vencer,
ya no,
maldita Araña.
de Benjamín Gavarre

!Acá va la vida!


Acá va la Vida
¿Acaba la vida? 
¡Acá va la vida!
Acá sigue la vida.
Acábala,
Vida
Acabala vida
Acá bala: vida
¡Ah, cava!
La vi. ¡Da!
Acá va.
La vi. 
Da.
¡Ah Cábala!: 
¡Vida!
de Benjamín Gavarre